Las enfermedades de salud dental están muy presentes en el día a día de las personas, y aunque muchas veces lo dejamos pasar sin darle importancia, es algo que hay que tratar a tiempo para que no vayan a más.
Hoy desde clínica Dens queremos hablar sobre el bruxismo, un problema dental que sufre gran parte de la población, tanto hombres como mujeres.
¿Qué es el bruxismo?
Bruxismo es el término que hace referencia a la acción incesante de rechinar y cerrar los dientes sin intención de hacerlo y en momentos inadecuados. Las personas que padecen de bruxismo a menudo no se dan cuenta de que han desarrollado este hábito, y no saben que el tratamiento está disponible hasta que se han dañado la boca y los dientes. A continuación, se enumeran los síntomas más comunes del bruxismo. Sin embargo, cada individuo puede experimentar los síntomas de una forma diferente. Los síntomas pueden incluir los siguientes:
- Dientes escoriados.
- Dolor facial.
- Dientes demasiado sensibles.
- Tensión de los músculos de la cara y de la mandíbula.
- Dolores de cabeza.
- Dislocación de la mandíbula.
- Daños en el esmalte dental, que exponen la parte interna del diente (dentina).
- Crujido o chasquido en la articulación temporomandibular (su acrónimo en inglés es TMJ).
- Indentaciones de la lengua.
- Daños en la parte de la mejilla.
¿Qué causa el bruxismo?
Aunque este hábito es involuntario, los especialistas de la salud oral a menudo consideran como causas características del bruxismo la tensión excesiva y ciertos tipos de personalidad. El bruxismo suele afectar a las personas que experimentan tensión nerviosa, ira, dolor o frustración frecuentes y a las personas demasiado competitivas, apresuradas o con tendencias agresivas.
Consecuencias del bruxismo
La persona que sufre bruxismo puede tener una serie de consecuencias que afectan a su salud. Entre las principales consecuencias destacamos:
- Fractura de los dientes: Al rechinar los dientes y apretarlos favorecemos la rotura de este, y es que pueden aparecer fisuras que con el tiempo hacen que los dientes se fracturen a nivel de los bordes incisales, de las cúspides de los molares o verticalmente.
- Sensibilidad dental: Poco a poco se va desgastando el esmalte, que es la parte más dura y la que protege el diente. Cuando se descubre la dentina, esta produce sensibilidad al fío y al calor, haciendo que el desgaste vaya más rápido porque la dentina es menos dura que el esmalte.
- Problemas musculares: La zona de las cervicales y la espalda se pueden ver afectadas, porque al hacer tanta fuerza por la noche creamos tensión en las cervicales.
- Insomnio: La persona que sufre bruxismo tiene una mala calidad del sueño, y si se altera puede llegar a causar insomnio.
Además de todo lo mencionado, el bruxismo puede generar la recesión o inflamación de encías, siendo un problema de salud dental importante. Unido a esto, se presentan los problemas y dolores al masticar, generando todo esto mal humor y afectando a toda la salud en general.
¿Cómo saber si se sufre bruxismo?
En el momento en el que una persona detecte estos síntomas, deberá acudir al profesional para iniciar un tratamiento y acabar con los efectos negativos del bruxismo.
- Dolores de mandíbula, cuello, oído y cabeza: cuando nos levantamos de manera continua con este tipo de molestias es probable que por la noche rechinemos los dientes.
- Tensión mandibular: cuando se aprietan mucho los dientes, con el tiempo se crea tensión en la zona de la mandíbula, provocando a su vez la alteración de los músculos.
- Desgaste de los dientes: con las visitas en el dentista, el profesional puede detectar si los dientes están desgastados como consecuencia del bruxismo. Además, hay que prestar atención a la sensibilidad que podemos sufrir.
- Problemas en la ATM: la articulación temporomandibular puede dejar de trabajar correctamente, creando fuertes dolores, tanto de cabeza como oídos, creando presión debajo de los ojos o tener molestias en la mandíbula si esta se encaja o se tienen problemas para abrir o cerrarla.
¿Cómo corregir el bruxismo?
Cuando el bruxismo está en un estado avanzado y grave, hay que poner un tratamiento que ayude a mejorar la situación. Para ello, lo mejor es acudir a la clínica y que el profesional de confianza nos ayude y determine la solución más adecuada.
- Férulas y protectores bucales: Estas están diseñadas para evitar el daño que se produce al apretar los dientes. Pueden estar elaboradas con acrílico duro o materiales blandos para ajustarlo a los dientes.
- Corrección dental: Cuando el desgaste del diente ya ha generado sensibilidad o la incapacidad para masticar adecuadamente, el dentista debe remodelar la superficie de masticación de los dientes, o colocar coronas para reparar el daño.
Además de estas soluciones, se pueden aplicar otra serie de medidas para reducir el bruxismo:
- Controlar el estrés y la ansiedad, para evitar los dolores mediante la relajación o meditación.
- Cambios en el comportamiento, practicando una buena posición de la boca y de la mandíbula.
- Biorretroalimentación, un método que consiste en utilizar procedimientos y equipos de control para controlar la actividad muscular de la mandíbula.
- Relajantes musculares, antes de dormir.
- Inyecciones de botox, ideal para personas que tienen bruxismo y que no responden a otros tratamientos.
- Medicamentos, que ayuden a calmar el bruxismo o que reduzcan la ansiedad o el estrés.
- Trastornos relacionados con el sueño, como por ejemplo la apnea del sueño. Al tratar estos problemas se puede mejorar el rechine de los dientes.
- Afecciones, y es que en caso de que la causa sea una enfermedad preexistente, como el reflujo grastroesofágico, el tratamiento de este problema mejorará la situación de bruxismo.
¿Cómo se diagnostica el bruxismo?
Durante las visitas periódicas al dentista, se examinan los dientes en busca de evidencias de bruxismo — a menudo indicadas por la apariencia plana de la punta de los dientes. Si los síntomas están presentes, se observan los cambios ocurridos en las siguientes visitas antes de establecer un programa de tratamiento.
Tratamiento para el bruxismo:
El tratamiento específico para el bruxismo será determinado por su dentista o médico basándose en lo siguiente:
- Su edad, su estado general de salud y su historia médica.
- Que tan avanzada está la enfermedad.
- Su tolerancia a determinados medicamentos, procedimientos o terapias.
- Sus expectativas para la trayectoria de la enfermedad.
- Su opinión o preferencia.
Aproximadamente una de cada tres personas sufre de bruxismo que, en la mayoría de los casos, puede ser tratado con éxito. El tratamiento puede incluir lo siguiente:
- Modificación de la conducta: Enseñar al paciente a descansar la lengua, los dientes y los labios de manera adecuada. Explicarle cómo descansar la lengua hacia arriba puede aliviar la incomodidad en la mandíbula al mantener los dientes separados y los labios cerrados.
- Férula:Durante la noche se puede usar un dispositivo para la boca de plástico para absorber la fuerza de la mordida. Este dispositivo sirve para evitar daños en el futuro a los dientes y ayuda a cambiar la conducta del paciente.
Cumplir con las visitas en el dentista es importante para que así el profesional pueda detectar a tiempo los indicios del bruxismo. Es algo muy común que muchas personas sufren, y que las consecuencias pueden ser agotadoras a causa del dolor y las molestias que genera.
Cualquiera de estos síntomas debe ponernos en alerta para empezar a cuidar nuestros dientes y tratar el bruxismo desde el principio. Por eso, desde clínica Dens os recomendamos acudir a vuestro profesional de confianza para ponerle fin a este problema lo antes posible.